5 tratamientos NO quirúrgicos que optimizan los resultados de la cirugía estética
Poco a poco hay que ir unificando los conceptos que tenemos nuestra cabeza sobre los tratamientos no invasivos y tratamientos quirúrgicos. De hecho, las intervenciones de uno u otro tipo son muchas veces complementarias y se ayudan unas a otras a conseguir el mejor resultado, especialmente si tienen que ver con procedimientos de reducción de volumen corporal (grasa) o de rejuvenecimiento. Estos son los 5 tratamientos que funcionan increíblemente bien cuando trabajan en equipo:
Liposucción abdominal y Emsculpt
La liposucción abdominal es uno de los tratamientos que ofrecen unos resultados sorprendentes en pacientes con problemas de grasa abdominal. Pero también es uno de los que tiene un postoperatorio más largo y delicado. Es en este contexto, muchos médicos recomiendan combatir la inflamación y acelerar la recuperación con sesiones de Emsculpt tras un mes de la cirugía.
El Emsculpt es un tratamiento que genera pulsos de energía electromagnética en el tejido muscular para crear contracciones musculares más allá de las que se logran con el ejercicio. Esto hace que sea una forma óptima de tonificación muscular.
Se ha comprobado que realizando dos sesiones por semana durante cuatro semanas, Emsculpt reduce sustancialmente las molestias del postoperatorio de una liposucción y ayuda con la cicatrización y con el resultado cosmético final.
Lifting facial y Plasma Rico en Plaquetas
El lifting facial es uno de los tratamientos definitivos para el rejuvenecimiento facial, pero es perfecto combinado con tratamientos no invasivos porque se reduce la inflamación y se multiplican los resultados.
Uno de esos tratamientos son las inyecciones de plasma rico en plaquetas (PRP) que estimula la producción de células reparadoras propias. Aunque actualmente el PRP se utiliza con muchos fines (incluso para pérdida de cabello), es en el ámbito del rejuvenecimiento y la reparación celular donde da mejores resultados.
Muchos doctores aplican PRP durante la intervención de lifting de rostro para mejorar la curación celular en el área, a la vez que se consiguen los beneficios generales del rejuvenecimiento de la piel. También se puede aplicar PRP tras la intervención, esperando varias semanas a que se haya producido la cicatrización preliminar, consiguiendo así mejorar la textura y la calidad de la piel.
Ginecomastia y Radiesse
Cada vez son más los hombres que ponen solución a la acumulación de tejido en la zona del pecho con una cirugía de ginecomastia. En estos casos está indicado inyectar Radiesse en el polo superior del pecho con el objetivo de rellenarlo un poco para que no quede superplano o cóncavo. Aplicado en estos casos, el Radiesse, un relleno dérmico compuesto por hidroxiapatita cálcica que se consigue por biosíntesis, consigue tensar cualquier laxitud de la piel, lo que es una clara ventaja para los hombres mayores
Blefaroplastia superior y Bótox
Aunque se suele decir que las operaciones quirúrgicas como la blefaroplastia tienen resultados de forma permanente, en realidad se trata de efectos que durarán unos 10 años aproximadamente, tras los cuales la piel volverá a comenzar a aflojarse y a perder tirantez por el envejecimiento.
Por ello, el bótox puede resultar el mejor aliado para prolongar los resultados en las blefaroplastias. Administrada a los 2 o 3 años de la intervención, la toxina botulínica alrededor del ojo relaja y refuerza la estructura muscular periocular tendrá un efecto extraordinario sobre el aspecto y la estructura de la piel.
Lifting de cuello y Kybella
La mayoría de pacientes inconformes con su cuello tienen dos problemas simultáneos: flacidez y acumulación de grasa. El lifting es un tratamiento en el que se estira la piel y que en el caso del cuello ayuda a reafirmar y a eliminar el exceso de piel.
Para que el resultado sea aún mejor, muchos especialistas recomiendan Kybella para tratar la grasa residual y solucionar la grasa submentoniana (el doble mentón o papada). Kybella es un medicamento inyectable, basado en el principio activo del ácido desoxicólico que inactiva la membrana celular y las paredes de la célula de grasa, finalmente las desactiva y las elimina del cuerpo.
La Kybella no solo es utilizada para personas con pequeños depósitos de grasa, sino como complemento de una mini-lipo de cuello para bolsas rebeldes y se puede inyectar unas pocas semanas o meses después del lifting de cuello.