Líbrate de las estrías con el láser fraccionado CO2
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Nuestra piel es uno de los órganos más expuestos del cuerpo, por lo que cualquier afección, por más mínima que sea, si se encuentra en un lugar donde no se acostumbra usar ropa, será fácilmente detectada por las personas. Es por ello que debemos mantener un cuidado especial en nuestra piel, para así lograr una imagen más estética.
Las llamadas estrías, que en la jerga científica se le conoce como estrías distendidas, son cicatrices que aparecen en momentos de nuestra vida en donde la piel se somete a periodos de tensión y relajación debido a factores hormonales o una mayor predisposición genética.
No solamente afecta a las mujeres, a pesar de que un período particularmente crítico es el embarazo, donde aparecen en el vientre y en los senos. Tanto las mujeres como los hombres de manera indistinta pueden mostrar estrías en varias zonas de su cuerpo, como los brazos, la espalda, las pantorrillas o los glúteos.
Es importante tratar de prevenirlas con una correcta hidratación en aquellas zonas que pueden presentar estas antiestéticas "laceraciones" de la piel, ya que su desaparición completa es muy difícil. Sin embargo, la medicina estética está para apoyar, y en la actualidad existen una infinidad de procedimientos mínimamente invasivos que buscan mejorar el aspecto de la piel.
De todos los procedimientos existentes, uno de los más populares es el láser fraccionado CO2, una herramienta que ya lleva varios años siendo utilizada por médicos dermatólogos para tratar problemas de la piel. Por lo que no debería ser una sorpresa el que se haya descubierto la utilidad del láser para eliminar o por lo menos reducir al máximo las estrías.
Láser fraccionado CO2
En la primera fase, cuando las lesiones muestran un color rosado y vienen acompañadas del típico prurito, se puede actuar rápidamente sobre la inflamación y evitar la consolidación de las cicatrices; después de un cierto tiempo, las estrías adquieren un color blanco y se estabilizan, siendo más difícil su tratamiento.
Una de las opciones más válidas para la eliminación de las estrías, que en algunos casos constituyen un serio daño estético, es el láser fraccionado CO2, que actúa con profundidad sobre el tejido lesionado.
El efecto vaporizador de su rayo permite modificar la estructura de colágeno presente en la dermis, con un proceso que rompe algunos eslabones de la cadena de modo que se contraen y estimulan la formación de nueva fibra. De este modo, se compensa la depresión cutánea que caracteriza la estría y se eliminan los bordes con una cuidada ablación de la epidermis.
¿Es efectivo?
La eficacia del tratamiento láser puede variar según las características específicas de la piel del paciente, así como de la entidad del daño y de la zona en la que se localizan.
Basta pensar cómo influye y acentúa la visibilidad de una estría el bronceado o los momentos en los que el calor y el frío causan una vascularización de la piel, para comprender que es necesario un equilibrio para suavizar su apariencia exterior.
El acercamiento médico a este tipo de imperfecciones debe ser extremadamente dulce y progresivo; no se puede prever con exactitud cuántas sesiones de láser fraccionado CO2 son necesarias para conseguir un buen resultado estético o si van a desaparecer completamente, por lo que es importante que en la comunicación entre el médico y el paciente haya prudencia y claridad.
Si las lesiones alcanza la capa reticular de la dermis no es posible eliminarlas del todo, sino que se crea una cicatriz igualmente antiestética, por lo que en estos casos merece la pena someterse a un ciclo de sesiones siendo conscientes del resultado final, que puede ser satisfactorio estéticamente.
Las sesiones tienen una duración breve, se necesita solamente de anestesia local tópica y se puede reanudar la actividad normal cuando terminan.
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Beneficios del procedimiento
Si estás pensado en acabar con las estrías de tu cuerpo con ayuda del láser, es necesario que tengas en cuenta los siguientes beneficios:
- Es un procedimiento mínimamente invasivo. O lo que es igual, el paciente no debe ingresar a quirófano.
- Los resultados se perciben rápidamente. Luego de una semana desde la última sesión, la paciente podrá notar una mejora en el tono de su piel. Como cada caso es diferente, hay que tener en cuenta que el tiempo de los resultados puede variar.
- Es indoloro. Lo único que puede llegar a sentir el paciente es una sensación de calor, la cual no es muy extrema, y se puede minimizar con la ayuda de anestesia local.
- Para casi cualquier tipo de paciente. El láser es tan efectivo y seguro, que se puede adaptar a casi cualquier tipo de piel, incluso las más sensibles. De todos modos, primero debes recibir una evaluación del médico para que este determine si eres candidata para el tratamiento.
- Sesiones en poco tiempo. Las sesiones de láser, por lo general, no dura más de media hora, aunque claro está, es necesario tener en cuenta que en base a la longitud del área donde se vaya a aplicar, el tiempo de duración puede variar.
- No genera incapacidad. A diferencia de la mayoría de tratamientos estéticos invasivos, la aplicación de láser CO2 no conlleva ningún tipo de incapacidad o período de reposo postoperatorio, por lo que se puede regresar a la rutina diaria al instante. Eso sí, debes tener en cuenta que la zona tratada no debe ser expuesta al sol durante una semana, y luego de este período, se recomienda mantener una correcta hidratación y uso de factor solar.
Si te interesa saber más sobre el tema, te invitamos a que le heches un vistazo a nuestra sección de experiencias, en donde conocerás historias de personas que han pasado por el tratamiento. 👩⚕️👨⚕️
