El aumento de mentón: una demandada y efectiva cirugía
Muchas veces olvidada, la zona del mentón es una parte crucial para tener un rostro simétrico, que al mismo tiempo sea atractivo para quienes nos rodean. Desafortunadamente, no siempre tenemos la imagen facial que deseamos, aunque, hoy en día, ya nada es un problema con ayuda de la cirugía plástica facial, en donde podemos encontrar procedimientos innovadores como la mentoplastia.
Esta intervención ha ido en importante aumento, debido al índice de pacientes desde hace 4 años en Estados Unidos. La mentoplastia busca mediante diferentes técnicas lograr un aumento o disminución del mentón.
Su función no sólo busca entregar una nueva forma y armonía al rostro, sino que también son muchos los que aprovechan la intervención para disimular los diversos tipos de arrugas en la zona. La duración de la intervención es rápida y se realiza bajo anestesia local o general, todo depende del caso. La recuperación de la mentoplastia es de aproximadamente una semana.
Según diversos estudios fisiológicos, un mentón pronunciado es característica de personalidad y decisión, y asimismo está manifestado que tiene que ver en la atracción entre ambos sexos. En ellos se buscan los mentones más cuadrados y grandes, y en ellas las formas más sutiles y las barbillas menos acentuadas. En consecuencia, aunque muchos lo desconozcan, cuando se someten a una mentoplastia se vuelven más atrayentes para el sexo opuesto.
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Motivos que invitan a una mentoplastia
Son muchas las razones que tienen las personas para someterse a este procedimiento, pero las más resaltantes son las siguientes:
- Para obtener un nuevo aspecto al acentuar o disminuir esta parte del cuerpo.
- Atenuar líneas de expresión propias de la edad, estirando la zona y devolviendo al rostro un contorno más definido.
- Un aspecto muy recurrente es aprovechar el procedimiento para recoger la papada y tener un cuello más estilizado y lozano.
- En contraste con lo anterior, existe la mentoplastia de reducción, que disminuye el volumen de la zona.
Diferentes tipos de mentoplastia
Se tiende a pensar que el aumento de mentón es una cirugía sencilla, que solo cuenta con un única forma de realizarse, pero lo cierto, es que hay diferentes técnicas que ayudarán al paciente, previa evaluación médica, a someterse a la mejor opción que logrará hacer realidad la expectativa tan deseada.
Implante externo. Consiste en implantar una prótesis de silicona o goretexpara marcar una nueva forma del mentón. Este material tiene una consistencia similar al hueso, logrando naturalidad y evitando anomalías, integrándose totalmente en la fisiología facial. Se suele utilizar para casos en los que se necesita más volumen y también es una buena táctica para disimular surcos de la edad. La prótesis es diseñada por un experto acorde a nuestras facciones y es definitiva, por tanto, si no se quiere, no se tiene que cambiar en toda la vida.
Reestructuración de la zona. Acá se trabaja con el material propio disponible del área y no se requiere de prótesis. Se trata de adelantar una parte del mismo hueso y con ello se consigue la forma anhelada. Con este método, aunque más complejo, se alcanzan resultados mucho más naturales. Luego de la intervención, se recomienda ingerir una dieta blanda debido a las molestias para masticar, evitar la exposición al sol y los ejercicios por un tiempo específico.
Preguntas recurrentes sobre la mentoplastia
¿Cómo sé si soy candidato?
El único que puede determinar si el paciente cumple con los requisitos para ser candidato a cualquier cirugía, es directamente la persona que vaya a llevar a cabo el procedimiento, es decir, el cirujano. Este hará una evaluación inicial, donde determinará la gravedad del problema y sus posibles causas.
¿Qué tipo de anestesia se aplica?
Como la intervención es ambulatoria, se aplica anestesia local, sin embargo, si esta viene acompañada de otra operación, como una liposucción de papada, entre otras, entonces en ese caso el paciente será sometido a anestesia general.
¿Cuánto se tarda en recuperarse?
Aunque cada caso es diferente, por lo general, durante los primeros siete días del postoperatorio, el paciente permanecerá con una banda de micropore en la zona tratada, luego, a su retirada, se verán mejor los resultados, aunque un poco inflamados. La hinchazón de la zona culminará al mes, cuando los resultados serán mucho mejores.
¿Cuánto dura la intervención?
Gracias a que la mentoplastia es un procedimiento sencillo, lo normal es que el paciente esté en quirófano desde media hora hasta una hora y media como máximo. Claro está, cuando se lleva a cabo otra operación complementaria, el tiempo de operación será muy superior.
¿Hay algún riesgo?
Como cualquier operación, hay posibilidades de efectos secundarios, entre los más comunes se encuentra: formación de hematomas, inflamación, movimiento involuntario de la prótesis, y en los casos más extremos, daño en la dentadura y sensibilidad en la zona tratada. Ten en cuenta que la mejor forma para reducir los riesgos, es someterse a un médico cirujano certificado, con especialización en cirugía plástica.
También debes darle importancia al centro médico donde realizas la intervención. Lo ideal es que este espacio cuente con todo lo necesario para ofrecer una atención completa, incluso si se llegase a presentar una complicación.
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