¿Cómo feminizar el rostro?
La evolución de tratamientos y operaciones de cambio se sexo ha llegado a niveles sorprendentes. Las personas que optan por cambiar su género tienen especial dificultad cuando se trata de cambiar sus rasgos faciales. Por suerte, las distintas cirugías de feminización facial brindan resultados asombrosos, que con el paso de los años va mejorando.
Considerablemente más común de los que muchos piensan, el cambio de sexo es una realidad que cada vez es más latente en las sociedades. Aunque hay una compresión y respeto por los derechos de cada persona, aún falta mucho por avanzar. En la actualidad, muchos hombres pasan a ser mujeres con todas las de la ley y, lo mismo para ellas, cuando deciden dar el giro tan anhelado en sus vidas.
El cambio de hombre a mujer es especialmente complejo cuando se trata del rostro, porque la cara femenina es de facciones más finas y estilizadas. Sin embargo, la cirugía plástica pone a disposición de aquellas mujeres que están llevando a cabo su cambio una amplia variedad de métodos con los que pueden feminizar su rostro y verse como realmente quieren ser.
Tiroplastia
En las mujeres transexuales la vaginoplastia y el aumento de mamas son obviamente las operaciones más demandadas, pero después de ellas la intervención más buscada es la tiroplastia, que consiste en la eliminación de la "manzana de Adán".
Esta prominencia también es conocida como nuez (cartílago) y es especialmente visible en los hombres biológicos. Cuando esta prominencia es muy notoria, se puede reducir, sin dañar las cuerdas vocales, para que el rostro sea más estilizado y femenino.
Dicha operación es sencilla y tiene una hora de duración. Además, la cicatriz que deja es casi invisible. Pasado los días la paciente puede notar algún cambio en el tono de voz, pero se debe a la hinchazón de la zona y desaparece pasados unos días.
El aumento de pómulos
Los pómulos son una de las zonas más destacadas en el rostro de una mujer biológica y por tanto, tienen mucha importancia dentro de los procesos de feminización facial.
Más frescura y armonía se logra a través de la operación de aumento de pómulos. La forma más habitual de realizarla es usando implantes de silicona que se ponen a través de una incisión en la boca, por lo que no deja ninguna cicatriz visible.
Esta intervención tiene una duración aproximada de una hora. Se realiza de manera ambulatoria si no se va a combinar con ninguna otra operación destinada a feminizar el rostro.
Es normal que al principio la paciente note una hinchazón, pero eso se irá en unos días. Y pasado unos meses, cuando el implante se haya asentado bien en su lugar, se apreciaran mejor los resultados.
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El perfil deseado
Luego de realizar cambios en zonas del rostro, como los pómulos o el mentón, suele suceder que la nariz que se tenía ya no queda proporcionada. En estos casos lo que se suele hacer es recurrir a una rinoplastia para conseguir un apéndice nasal que dé un aspecto más armónico.
Un dato importante es que este tipo de operación es de lejos la más demandada en los procesos de transexualidad. La intervención consiste en el aumentando o reducción del tamaño de los orificios nasales, la configuración y ángulo de la nariz.
El proceso es tan común que se lleva a cabo en una o dos horas y en la mayoría de los casos, la paciente es dada de alta el mismo día de la operación.
Mentoplastia punto clave para estilizar el rostro
El mentón tiene una influencia directa en la forma que se percibe el rostro de los demás. Un mentón de forma cuadrada o demasiado prominente se suele asociar con los hombres biológicos, por eso las mujeres que han cambiado de sexo modifican esta parte de su cuerpo.
Reduciendo el mentón se logra destacar más la zona de la boca y se equilibra el aspecto.
La mayoría de las veces la mentoplastia se realiza, siempre que se puede, a través de la boca, para evitar la presencia de cicatrices visibles. En caso de no ser posible, se intenta que la cicatriz quede debajo del mentón para que pase lo más desapercibida posible.
Para llevar a cabo esta operación se requiere anestesia general y puede durar de una a dos horas. La inflamación inicial, lógicamente, desaparece pasados unos días, pero habrá que esperar unos meses a que los tejidos estén completamente recuperados para poder apreciar el resultado final.
Mirada perfecta con la blefaroplastia
Una buena alternativa si se desea conseguir un rostro femenino más bello y juvenil. Esta intervención extrae el exceso de grasa debajo de los ojos, reduce las bolsas, ojeras y corrige los párpados caídos, según corresponda.
El resultado es un rostro con un aspecto mucho más vivo y joven, conseguido a través de una intervención ambulatoria que se lleva a cabo con anestesia local. Pasada una semana la paciente podrá volver a su vida habitual.
Lifting facial feminizante
Todas las zonas del rostro se pueden modificar y mejorar para conseguir una mayor feminización facial, pero también se puede optar por remodelar directamente el rostro para darle un aspecto más femenino. Esto es algo que se puede conseguir a través del lifting facial feminizante, que a la vez ayuda a reducir las líneas de expresión.
La operación consiste en reposicionar las capas musculares, la piel y la grasa, retirando el tejido sobrante. De esta forma se consigue un óvalo facial más definido y un rostro con menos arrugas.
Lo positivo, además, es que las cicatrices de esta intervención quedan escondidas detrás del lóbulo de la oreja y en el cuero cabelludo, por lo que son realmente discretas. El tiempo de esta intervención puede durar entre tres y cinco horas, ya que es más compleja que las anteriores. Se utiliza anestesia general y se recomienda por lo menos unas dos noches hospitalizada. Los resultados definitivos se aprecian en un plazo de 10 a 15 días.
Todas estas técnicas de feminización de los rasgos faciales es un paso muy significativo para que los pacientes transexuales puedan verse realmente como mujeres. Sin duda que la intervención siempre es personalizada, de acuerdo a los rasgos faciales de cada persona, por lo que los resultados son muy naturales. Por eso, es relevante buscar a un cirujano especializado qué sepa valorar los cambios que cada paciente requiere y adaptarlos a su estructura maxilofacial.
Si deseas realizar estos cambios en tu vida y estás pensando en someterte a un tratamiento que dulcifique tus rasgos, revisa en la sección de doctores al profesional que irá de la mano contigo en este importante proceso. 💁♀️🧖♀️