Dos técnicas para el engrosamiento del pene
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De todas las partes del cuerpo de un hombre, la que genera más complejos es el pene, ya que durante muchos años, ha sido asociado a la masculinidad y hasta virilidad del hombre. Tanto el tamaño como el grosor de este miembro son relativos, ya que no existen medidas ideales, a pesar de todo, se han creado cánones de belleza en la sociedad con respecto al tema.
Es común pensar que uno de los aspectos que más puede acomplejar a un hombre es el tamaño de su pene, sin embargo, son muchos quienes también sienten vergüenza al pensar que poseen un miembro más delgado de lo normal. Por lo que el engrosamiento se ha vuelto una intervención tan demanda como el alargamiento de pene.
El engrosamiento de pene va en aumento, debido al desarrollo de nuevas técnicas sencillas y seguras que permiten a muchos pacientes acabar con sus complejos.
Se considera un pene delgado cuando su grosor es menor a ocho centímetros, en ese caso los especialistas recomiendan recurrir a dos tipos de intervenciones que son sencillas y no poseen grandes riesgos.
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¿Qué es el engrosamiento del pene?
La medicina estética cuenta con dos procedimientos estrellas para aumentar el grosor del pene, el primero consiste en utilizar rellenos de material biológico como el ácido hialurónico o la toxina botulínica, y el segundo consiste en utilizar grasa del paciente, extraída de otras partes del cuerpo. Hay que tener en cuenta que estos procedimientos se centran en aumentar el grosor de todo el tronco del pene, exceptuando el glande, ya que a pesar de que se trabaja en técnicas de engrosamiento del glande, no se han tenido buenos resultados hasta ahora.
El relleno con material biológico se caracteriza por ser menos invasivos, ya que al paciente, en la mayoría de los casos, no se le aplica anestesia general, tampoco es necesario el ingreso a quirófano. El relleno con grasa, por otra parte, si es más invasivos y es parte de lo que se conoce como Faloplastia, que son operaciones que buscan mejorar el aspecto físico y la funcionalidad del miembro masculino.
Engrosamiento de pene con relleno biológico
Como ya lo hemos mencionado anteriormente, en este procedimiento se utilizan rellenos como el ácido hialurónico, la toxina botulínica o el colágeno. Para este tipo de intervención se inyecta el material directamente en el tronco del pene, con el objetivo de aumentar por lo menos unos dos centímetros el grosor.
Tanto el ácido hialurónico como la toxina botulínica son absorbibles, es decir, con el paso del tiempo el organismo los va consumiendo, hasta que ya no quede rastro de este, y por ende, el grosor del pene volverá a su estado natural. Aunque no hay una fecha exacta para saber cuánto va a durar el resultado, en promedio estamos hablando de un año.
Con una sola sesión basta para tener resultados, aunque si se quiere mantenerlos con el tiempo, será necesario llevar a cabo repeticiones anuales del tratamiento.
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Engrosamiento de pene con grasa
Considerada una técnica muy segura y con resultados duraderos. En esta intervención, el cirujano extrae grasa localizada en una parte específica del cuerpo, para luego limpiarla, y terminar aplicándola en el tronco del pene. El procedimiento es similar al anterior, solo que cambia el material utilizado.
Como el relleno es grasa del propio paciente, las probabilidades de que el organismo genere rechazo son muy bajas. Aunque estamos hablando de un procedimiento permanente, se debe tener en cuenta que con el paso del tiempo, el cuerpo irá absorbiendo hasta un 40% de la grasa inyectada, por lo tanto, el cirujano debe calcular la cantidad de grasa necesaria para generar resultados óptimos a largo plazo.
Es considerada como una de las intervenciones estéticas íntimas más seguras para los hombres, y como no para de innovarse, los riesgos son cada vez más bajos.
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Cuidados luego de la intervención
Es importante tener en cuenta que luego de la intervención el paciente puede sentir molestias, un poco de dolor e incluso inflamación, es común que en estos casos el médico recete el uso de analgésicos o antibióticos.
La ducha o lavados deberán suspenderse al menos cuatros días luego de la intervención y no se recomienda el uso de jabón. Tampoco se aconseja el uso de ropa ajustada, hasta que el tiempo de recuperación haya finalizado.
También se debe evitar el consumo de alcohol y de tabaco para no interrumpir el proceso de cicatrización. Respecto a los puntos, es normal que se caigan en unas semanas, ya que generalmente se utilizan suturas reabsorbibles.
Una de las últimas consideraciones a tener en cuenta en el proceso de recuperación, es que el paciente deberá tener abstinencia sexual completa durante un mes aproximadamente.
Es importante asesorarse por un médico antes de esta intervención, debido a que muchos hombres tienen la idea de que su pene es pequeño o delgado, lo que en realidad no es así. Muchos especialistas coinciden en que un número importante de quienes llegan a sus consultas poseen un problema de inseguridad, más que un problema fisiológico.
Para terminar, recuerda solamente acudir con médicos cirujanos certificados, con suficiente experiencia en la realización de operaciones estéticas íntimas.
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