El tratamiento de voluminización de labios es uno de los No 1 a nivel mundial. Por ejemplo; en Canadá más del 60% son de relleno de labios, en Europa, se estima que un 55% y en Asía un 17%. En Chile, las mujeres que desean aumentar sus labios buscan un resultado discreto que se adapte especialmente a la morfología de la cara, para obtener un aspecto más natural y evitar el temido efecto de los "labios de pato".
El relleno es uno de los métodos más populares para el aumento de labios. Consiste en la infiltración de ácido hialurónico con el fin de obtener mayor volumen y definición. El ácido hialiurónico es un constituyente natural de la piel por lo que se integra en el tejido perfectamente y ofrece un aspecto totalmente natural.
Sin embargo, el relleno, que es un tratamiento de medicina estética, no es la única técnica disponible para aquellos que desean tener labios más carnosos, de hecho, es posible intervenir con cirugía estética y operaciones estéticas, como el Lip Lift o Permalip.
Con el aumento de labios se pueden buscar diversos objetivos, los más comunes son:
Hombres y mujeres pueden recurrir a este procedimiento. Los candidatos ideales son personas que, debido a su anatomía o envejecimiento, tienen labios delgados o asimétricos. No hay un límite de edad para realizar un aumento o perfilado de labios, lo que sí que se recomienda es esperar hasta los 18 años. Salvo por un tema estético que comprometa la calidad de vida de la persona.
El aumento de labios está contraindicado en pacientes portadores de enfermedades inmunológicas, alergia a los anestésicos o bien pacientes con tendencia a formar queloides.
Para un aumento temporal de los labios, es decir, con inyecciones de ácido hialurónico (rellenos), puedes acudir a un médico o cirujano dentista calificado para realizar tratamientos de medicina estética. Para intervenciones quirúrgicas como el Permalip o Lip Lift, necesitarás un cirujano especializado en cirugía plástica, reconstructiva y estética.
Al igual que con cualquier procedimiento, es importante acudir únicamente con cirujanos reconocidos y autorizados con experiencia. También puedes leer las reseñas de otros pacientes en Internet y hacer algunas investigaciones para ver las fotos de antes y después, revisa precios y presupuestos, no confíes de inmediato en los más económicos y tampoco dudes en consultar a diferentes médicos para recibir opiniones diferentes y encontrar el especialista que mejor se adapte a tus necesidades.
Durante la visita inicial, el médico examinará la forma de los labios y la boca y su proporción con el resto de la cara. Precisamente este último aspecto, la proporción, es el elemento que, sobre todo, permite alcanzar un resultado natural y estéticamente agradable.
El segundo consiste en explicar al paciente que existen diversas técnicas de relleno de labios, de acuerdo con las necesidades individuales de cada paciente.
Antes de continuar con las diferentes técnicas de aumento de labios, es importante recapitular los diferentes elementos de su anatomía. El labio está compuesto de diferentes partes, como también se puede ver en la imagen de abajo:
Es
fundamental el conocimiento anatómico del territorio en cuanto a su
vasta red arterial venosa, ya que representará un alto riesgo el no
conocer los planos anatómicos correctos donde deba ser aplicado el
producto.
Esta es la técnica es la más común para el aumento de labios, es un procedimiento simple, rápido y que puede ser realizado en la clínica por un médico estético. También es un método que da resultados temporales, dado que la sustancia utilizada con el relleno es ácido hialurónico, que es reabsorbible y, por lo tanto, no es definitivo.
El procedimiento de relleno de labios consiste en una inyección o infiltración subcutánea realizada con una aguja muy delgada y tiene una duración entre 25 y 30 minutos. La ventaja del ácido hialurónico sobre otros materiales, es que permite poder retirar el relleno a través de la utilización de una enzima conocida como la hialuronidasa, representando un aspecto fundamental, en el manejo de seguridad hacia el paciente. La recuperación es inmediata y es posible volver inmediatamente a todas las actividades diarias normales.
Antes del tratamiento, el área a tratar se limpia y desinfecta y luego se aplica un ungüento anestésico, en algunos casos acompañado de anestesia infiltrativa en la zona para bloquear el dolor completamente y logrando que la inyección sea indolora para el paciente.
Los resultados duran entre 5 y 6 meses, pero el efecto y la duración pueden ser subjetivos según las características individuales del paciente (edad, tipo de piel, humo, exposición al sol, etc.).
Los primeros días después del tratamiento, el volumen de los labios puede aparecer mayor que el deseado o incluso exagerado debido a la inflamación después de la inyección. También puede ocurrir que después de la primera semana el volumen adquirido disminuya debido a la integración del ácido hialurónico con los tejidos, pero la sustancia siempre estará presente y servirá como base para la infiltración de un segundo vial.
Nuestro cuerpo fabrica de forma natural ácido hialurónico, el cual está sujeto a la degradación por agentes oxidantes y la hialuronidasa. Este dura aproximadamente 12 horas antes de ser degradado y el acido hialuronico que se inyecta dura entre 5 a 9 meses en el organismo, por esta razón es bien aceptado y biocompatible, por lo que el riesgo de alergias es muy bajo. Sin embargo, es posible que pequeñas protuberancias puedan comprometer el resultado o que se formen pequeñas bolas en los labios después de una inyección de ácido hialurónico, que puede eliminarse con una sustancia denominada hialuronidasa.
Actualmente hay muchos rellenos en el mercado, y algunos de ellos han sido diseñados específicamente para los labios. Hay distintos tipos de marcas, las más utilizadas y certificadas son:
Es importante subrayar que el aspecto principal en el que centrarse no es la elección de la marca del producto utilizado, sino la elección del médico. o el cirujano estético en el que confiar: será el médico, un verdadero profesional y especialista en el campo, para evaluar qué producto elegir.
Es una operación quirúrgica que, por lo tanto, siempre debe realizarse en un quirófano y se realiza de forma ambulatoria sin la necesidad de una admisión postoperatoria. La intervención dura unos 30 minutos en y se realiza bajo anestesia local.
Antes de la cirugía, tu cirujano te dará toda la información que necesitarás para prepararte para el lipofilling y te indicará cuándo es más apropiado dejar de fumar antes y después de la cirugía o qué medicamentos debes tomar o evitar.
En el procedimiento de lipofilling de la cara, las herramientas utilizadas serán mucho más delgadas que las utilizadas para el cuerpo. El cirujano tendrá que recoger el tejido adiposo o la grasa autóloga del paciente (generalmente del estómago o los muslos) con microcánulas, para luego purificarlo e introducirlo en el músculo labial y los contornos de los labios para volver a trabajar el contorno y aumentar el volumen. Las cicatrices son invisibles (menos de 1 mm) pero quedarán ocultas en las comisuras de la boca. Otro beneficio de la grasa es que mejora la calidad de la piel debido a su alto contenido de células madre.
El postoperatorio del lipofilling no presenta molestias particulares, pero tu médico te mostrará los trucos a seguir y la mejor manera de lidiar con esta fase. Si se aplican suturas, se retirarán después de aproximadamente 4-5 días. Es recomendable reanudar el trabajo entre 4 y 10 días después de la cirugía y la actividad física después de 3 semanas.
Los resultados son inmediatos y el porcentaje de injerto del tejido transferido con lipofilling está entre el 30% y el 60%. Por lo tanto, el resultado es duradero y estable a lo largo del tiempo, a diferencia del ácido hialurónico, que debe repetirse después de unos pocos meses. El resultado final se puede apreciar realmente después de 3 meses y en algunos casos puede ser necesaria una segunda intervención para retocar el volumen y perfeccionar el efecto final.
Las posibles complicaciones o efectos secundarios pueden incluir inflamación, moretones o hematomas en los días siguientes a la operación. Al igual que con otros procedimientos, existe la posibilidad de que se puedan producir imperfecciones estéticas, como el exceso de volumen o la asimetría.
Otra forma de aumentar el volumen de los labios, incluso si es más invasiva que las anteriores, es la inserción de la mini prótesis de silicona llamada Permalip.
El Permalip se aplica con un procedimiento de cirugía estética que dura unos 30-45 minutos. Estas prótesis están disponibles en diferentes tamaños (3 longitudes y 3 anchuras) y se elegirán según el volumen que desee alcanzar y las características iniciales.
Además,el material de Permalip es seguro y no se expande a los tejidos circundantes del área en la que se inserta. El procedimiento se realiza bajo anestesia local e implica la incisión de dos pequeños cortes en las esquinas del labio, que luego se cerrarán con suturas invisibles una vez que se complete el procedimiento.
Durante el período postoperatorio, tu médico puede recomendar aplicar una crema calmante para facilitar el proceso de curación. Las suturas aplicadas son generalmente absorbibles y será posible volver a trabajar después de aproximadamente 5-10 días, mientras que la actividad física se puede reanudar después de 3 semanas.
El resultado es inmediatamente visible, aunque tomará unos días antes de que se estabilice. El resultado final, que será permanente, se puede apreciar después de 2 meses
Complicaciones y efectos secundarios
La gran ventaja de esta técnica no es sólo el resultado permanente,sino también su reversibilidad: si el paciente no está satisfecho con el resultado puede pedir a retirar el implante, sin dejar marcas y cicatrices , y volver al punto de partida con otra intervención de unos 30 minutos.
Finalmente, encontramos el lip lift o levantamiento del labio superior. No es un procedimiento en sí mismo para aumentar el volumen de los labios, pero también tiene el efecto de aumentar el volumen del labio superior. También esta técnica, como el Permalip, ofrece un resultado definitivo.
Esta intervención puede ser aconsejable en los casos en que el paciente tenga un exceso de prolabio (es decir, la parte blanca del labio) o cuando, con la edad, el bermellón del labio superior haya perdido el tono, la proyección o el volumen.
Como este es un procedimiento quirúrgico, será necesario realizar 1 o 2 consultas con el cirujano antes de realizar la operación, para aclarar todas las dudas posibles. También se recomienda dejar de fumar al menos un mes antes de la operación y continuar sin fumar incluso en el mes siguiente, y también debe evitar tomar aspirina o medicamentos antiinflamatorios durante 15 días antes de levantar el labio.
La intervención tiene una duración rápida, entre 30 y 45 minutos y se realiza bajo anestesia local. El cirujano hace una incisión en el hueco de las fosas nasales, justo debajo de la nariz y luego retira una pequeña tira de piel ubicada entre la nariz y el bermellón (el tamaño varía según el resultado que se obtenga) y finalmente cerrará la incisión.
El procedimiento no es doloroso, sin embargo, si durante el postoperatorio experimentas molestias, será posible tomar analgésicos simples, siempre siguiendo las instrucciones de tu cirujano. En general, se recomienda aplicar hielo en el área tratada para reducir la hinchazón, que puede durar de 7 a 21 días. También puedea aplicar una crema calmante y los puntos se quitarán entre el quinto y el octavo día. El trabajo puede reanudarse después de 5-10 días y la actividad física después de 3 semanas.
Los resultados son inmediatos y definitivos. Los resultados finales son visibles después de 1 mes y medio. Las cicatrices serán imperceptibles y el labio superior será más grande, mientras que la longitud total de los labios será menor.
Respecto a cualquier complicación o efectos secundarios es posible que durante los primeros 15 días se sientan algunas molestias, como edema, cambios en la sensibilidad, exceso de mucosa. Los posibles riesgos incluyen irregularidades o asimetrías que pueden afectar el resultado estético.
En medicina, cualquier tratamiento puede tener riesgos de fracaso o incluso efectos secundarios impredecibles, pero el tratamiento en sí no es de riesgo si es realizado por un profesión que maneje el área maxilofacial.
Es subjetivo y depende del metabolismo, es decir grado de envejecimiento u oxidación de los tejidos, pero también de los factores externos, la cantidad inyectada y el tipo de relleno. En general, va de un mínimo de 3 meses a un máximo de 8 meses.
Es necesario tratar la piel, los labios y los labios con constancia y, a menudo, hidratar al menos 2 veces al día, cubrir las áreas afectadas con una base para proteger la piel del choque térmico, evitar la exposición al sol. Se debe cuidar la alimentación especialmente la rica en antioxidantes.
Los labios tienden a volver a la conformación antes del tratamiento. Sin embargo, siempre estarán en mejores condiciones dada las propiedades del ácido hialurónico que es hidrofílico, por ende aporta una importante humectación.
Afortunadamente, el ácido hialurónico es el único material de relleno que tiene la posibilidad de ser degradado al inyectar hialuronidasa para disolver el implante, si es demasiado abundante en uno o más puntos. Si quedan arrugas, o si el aumento no parece suficiente, es posible realizar una segunda o incluso una tercera aplicación. Se debe tener presente que la cantidad del relleno utilizada dependerá del tamaño de los labios de base que posea el paciente