Un incorrecto tratamiento de brackets puede dañar nuestros dientes
El estado de los dientes son un reflejo de nuestra salud bucal, de ahí la importancia de mantenerlos en buen estado, incluso de realizar tratamientos especiales para garantizar una correcta sonrisa. El tratamiento estrella para corregir posturas de dientes son los brackets o aparatos, de los que hablaremos con más detalle.
Los brackets son unas piezas que sirven para soportar un arco que posiciona y alinea nuestros dientes correctamente. El tratamiento es importante para una buena corrección dental. Los brackets pueden ser metálicos, lo cuales normalmente son más económicos, de cerámica, plástico o policarbonato y se suelen enganchar directamente sobre nuestros dientes. Aunque existe un listado oficial de tratamientos homologados clínicamente, éstos no suponen una garantía 100% fiable si no se llevan a cabo de forma adecuada.
En muchas ocasiones, el problema radica en no programar un tratamiento personalizado y utilizar una manera de sujeción estándar para todos los pacientes. Esto supone que la respuesta de cada dentadura a la sustancia de enganche pueda ser diferente y afectar de manera desigual en una persona u otra. Si quieres saber más sobre todo lo que implica un trabajo de ortodoncia, no puedes parar de leer.
La importancia de controlar los brackets
Los brackets se adhieren a nuestro esmalte durante periodos de tiempo que van de entre un año y medio a dos años y, por ello, deben tener un control periódico. Aunque es un método utilizando en todo el mundo, existen varios problemas que pueden surgir a raíz de una mala aplicación del tratamiento, tales como:
- Pérdida de esmalte. Tal y como comenta Jacqueline Adelina Rodríguez, estudiante asociada del Instituto de Física UNAM, al despegar los brackets, éstos pueden dañar nuestro esmalte natural si no se tiene el cuidado suficiente. Según se ha demostrado el esmalte dental es un tejido que no se regenera, por tanto, si al retirar los brackets se produce algún daño, este será irreversible. Además, una pérdida de esmalte puede suponer que quede a la vista la dentina, que es el tejido inferior al esmalte que tiene un tono más amarillento. Pese a todo, existen tratamientos que pueden restaurar de forma artificial el esmalte.
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- Microrotura. Aunque a simple vista no lo veamos, la extracción de los brackets puede suponer la rotura del diente, si se hace de forma demasiado agresiva. Esto dará debilidad a nuestra dentadura y podrá provocar posibles roturas posteriores.
- Limpieza. Otro de los problemas que pueden implicar los brackets es la acumulación de comida y restos que quedan atrapados y que, con una simple limpieza muchas veces no se eliminan. Por eso, es imprescindible un exhaustivo control de la higiene para evitar ácidos que atacarán a la pieza, además de la acumulación de placa y la generación de caries.
¿Cómo evitar los efectos secundarios de los brackets?
La mejor forma de garantizar que tu tratamiento corrector de dientes sea todo un éxito, es realizarlo con un profesional certificado, o lo que es igual, un dentista con especialización en ortodoncia. No hay otro profesional capacitado para tal fin.
Cuando vayas con un dentista, este debería hacer una evaluación completa del problema, determinando en principio si el problema de la persona es lo suficientemente grave como para necesitar brackets. Algunos problemas de corrección pueden ser solventados con aparatos temporales. Una vez determinada la necesidad de aparatos, el dentista solicitará estudios más extensos para corroborar el estado de salud de los dientes, para ya poder terminar con la implantación de los brackets.
Algunas personas afirman que el procedimiento es un poco doloroso, o por lo menos molesto. Sin embargo, el grado de dolor tiene relación directa con el profesionalismo del dentista, ya que los buenos especialistas ejercen sin mayores inconvenientes.
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¿Qué puedo hacer como paciente?
Pero no todo queda de parte del especialista, los pacientes también son responsables de los efectos que podría tener la ortodoncia en los dientes.
La alimentación es una pieza clave para tener dientes sanos con ortodoncia. Mientras se llevan brackets se recomienda la eliminación de algunos alimentos de nuestra dieta que pueden quedar acumulados entre los brackets sin que nos demos cuenta: pipas, palomitas, chicles y demás alimentos que al ser muy duros pueden dañar y romper la ortodoncia. También debes tener cuidado a la hora de ingerir alimentos muy duros, ya que podrían dañar el trabajo de ortodoncia.
Un cepillo interdental es un gran aliado en estos casos, ya que permite limpiar aquellas zonas donde no llega un cepillo normal. Recuerda también utilizar hilo dental, y en caso de estar en la calle y no tener tiempo o un lugar para limpiar bien los dientes, puedes aplicar un poco de cera dental. Tras desprenderse de los brackets es imprescindible hacer una limpieza bucal a fondo, si no podrían quedar restos del material adhesivo en los dientes con rugosidades, creando un espacio propicio para caries y placa bacteriana.
Recuerda limpiar los dientes después de cada comida, además de ir rutinariamente al dentista para que revise el estado de los dientes y lleve a cabo una limpieza profunda.
¿Tienes dientes torcidos? ¿Te gustaría instalarte brackets, pero tienes dudas sobre el procedimiento? Entonces debes ingresar en nuestra sección de pregunta al doctor para consultar directamente con un especialistas todas tus dudas y temores. 🤓🦷