Todo acerca del aumento mamario
La cirugía de busto abarca diferentes procedimientos que pueden realizarse dependiendo de las necesidades de cada paciente y de los resultados que desea lograr.
Aumento de busto
Uno de los procedimientos más populares de la cirugía plástica hoy en día es el aumento de busto, el cual consiste en la colocación de implantes mamarios, que tiene la función de dar volumen.
El implante se puede colocar de dos maneras, ya sea debajo de la glándula mamaria o debajo del músculo. La forma en que se determina la colocación del implante depende de las características de cada mujer. Si la paciente tiene algo de volumen en la glándula mamara, lo ideal es poner debajo de ella, para evitar que con el tiempo esa glándula se desplace hacia abajo y el implante se quede arriba detenido por el músculo. Si la paciente no tiene prácticamente nada de glándula mamaria, sino sólo piel y músculo, lo ideal es poner el implante debajo del músculo, para que tenga mayor cubierta.
El médico con experiencia puede lograr la forma de busto que la paciente desea y sugerir si requiere un implante redondo o de forma anatómica, de acuerdo con sus características físicas. Esto va a depender tanto del gusto de la paciente como de la percepción anatómica y estética del médico.
La comunicación con el médico es muy importante para la elección del tipo de implante, y para que el resultado sea estético y armónico.
Algunas pacientes preguntan por la colocación de implante vía umbilical. Efectivamente, este procedimiento existe, pero es muy poco común que se indique, ya que requiere de una disección (separación de tejidos) muy extensa que va desde el ombligo hasta el pecho, hay poco control de la visibilidad para el cirujano, existe mayor sangrado y requiere del uso de implantes de solución salina, que tienden a perder volumen con el paso del tiempo. Estas dificultades hacen que este procedimiento sea poco aconsejable. Es importante tener en cuenta que para la cirugía de aumento de volumen mamario van a quedar pequeñas cicatrices, dependiendo del lugar donde se practique la incisión.
La colocación de los implantes se puede hacer por tres vías:
- Incisión periareolar: medio circulo alrededor de la areola
- Incisión inframamaria: abajo del pliegue mamario
- Incisión transaxilar: desde la axila
Incisión periareolar
Consiste en medio círculo alrededor de la areola, en donde cambia el color de la piel entre la areola y la mama. Esta cicatriz es menos notoria desde un inicio, sin embargo, es fundamental considerar que con este procedimiento puede existir la posibilidad de sesionar una parte de la glándula o algunos pequeños conductos de lactancia. Si la paciente tiene pensado un embarazo y lactar después de la cirugía, probablemente sería recomendable colocar los implantes en el pliegue inframamario, porque se respeta la glándula, y no se dañan conductos de lactancia.
Incisión inframamaria
Va en el pliegue inferior mamario, es una incisión muy noble, con la cual se respeta completamente la glándula mamaria. Con este procedimiento se daña la glándula, ni los conductos de la lactancia como tampoco la sensibilidad. En un inicio la cirugía es perceptible, pero con el paso del tiempo tiende a disminuir notoriamente.
Incisión transaxilar
Esa incisión se localiza en la parte media de la axila. También es una incisión muy notable debido que a que no se afecta la glándula mamaria, sin embargo, es importante tomar en cuenta que, si por alguna razón queda una cicatriz notoria, puede ser visible con cierto tipo de ropa.
Cuando se realiza una incisión transaxilar el implante se sitúa debajo del músculo, lo cual hace que el procedimiento sea poco recomendado para aquellas pacientes que requieren la colocación del implante debajo de la glándula mamaria y sobre el músculo.
Los implantes y su mejor elección
Existen muchos tipos de implantes mamarios. Los ideales son los texturizados de gel cohesivo. La ventaja de este material es que, si por alguna razón el implante se llegara a romper, no hay derrames ni infiltración en los tejidos. También hay implantes de solución salina, cuyo contenido es líquido.
La forma del implante depende de lo que la paciente esté buscando. Actualmente existe una gran variedad de tipos: redondos o en gorma de gota (anatómicos).
La proyección de los implantes puede variar de acuerdo con el volumen y al tipo, por ejemplo, el implante de perfil bajo tiene una proyección de entre dos y tres centímetros; el perfil medio, de entre tres y cinco centímetros; y los perfiles más altos pueden alcanzar proyecciones de hasta seis centímetros. La decisión definitiva para la elección del implante se debe tomar entre paciente y médico. Esto se puede facilitar mediante el uso de probadores que le dan a la paciente una idea muy clara de los posibles resultados. Unos Tips para seleccionar el tamaño del implante: 1º Valorar la estatura del paciente 2º considerar el ancho de los hombros 3º Cantidad de la glándula mamaria 4º gusto personal
Levantamiento de busto (pexia mamaria)
Esta cirugía se practica cuando la paciente tiene algún tipo de flacidez,la cual obedece a una reducción considerable de peso, luego de haber tenido uno o más embarazos, por amamantar o como resultado de la gravedad.
El procedimiento consiste en poner a la distancia adecuada el pezón y la areola con el fin de dar el volumen ideal a la mama ideal. Por lo general, el procedimiento se complementa con la colocación de implantes, pues la caída de mama frecuentemente va acompañada de pérdida de volumen.
También es común que exista un exceso de piel en la parte inferior de la glándula mamaria y que la areola se encuentre en una posición más baja a la adecuada. El procedimiento consiste en reubicar la posición de la areola, eliminar el exceso de piel y recolocar los tejidos en una posición más firme.
El levantamiento de busto es un procedimiento noble con efectos muy agradables, sin embargo, es imprescindible tener presente que queda una cicatriz (más notoria que en el aumento de busto) y, según la técnica que se practique, la línea será oblicua, recta o puede tener diferente dirección, en algunos casos, puede quedar una cicatriz pequeña en el pliegue inframamario.
Reducción de busto
Este procedimiento se practica cuando se tiene un exceso de volumen de mama. Su finalidad es disminuir el volumen de la mama y levantar a la posición adecuada.
La altura del busto que se considera estándar es de 21 centímetros, midiendo desde la quila del esternón, que es un punto localizado debajo del cuello en donde inicia el hueso y se une el esternón con las costillas, hasta la punta del pezón. Sin embargo, esta distancia puede variar dependiendo de las características físicas de cada persona, de su estatura y de la complexión de sus hombros.
En esta técnica se tiene que remover (resecar) piel y glándula, normalmente de los polos laterales y del polo inferior. También es importante considerar las cicatrices que quedan después de la reducción de busto, las cuales se localizarán alrededor de la areola, de la areola al pliegue inframamario y a lo largo del pliegue inframamario. La longitud de las cicatrices será proporcional a la cantidad de tejido que se remueva.
Existen algunas técnicas en las que se han modificado las cicatrices en cuanto a forma y longitud, sin embargo, lo más común son las cicatrices que se acaban de mencionar.
Recambio de implantes
Debe verificarse que los implantes que se usan sean nuevos, estén esterilizados. La duración del implante puede ser superior a los diez años, dependiendo del tipo que se utilice. En la actualidad todavía es difícil predecir si pueden durar veinte, treinta o cien años, hasta que lleguemos a la época en que haya pacientes que tengan más de cincuenta años con los implantes puestos, y se compruebe que no causan ningún tipo de alteración.
Lo ideal es sugerir que la paciente se realice una valoración médica a los diez años después de la cirugía, y en caso necesario hacer un cambio de implante.
A la fecha, hay algunas pacientes que llevan más de treinta años de haberse colocado los implantes, pero se trata de implantes de muy mala calidad, pues anteriormente el contenido de las prótesis era de silicón líquido, y si el implante se llegaba a romper, el líquido se derramaba y se infiltraba en los tejidos, lo que podría ser tóxico. Además, la cápsula que envolvía el contenido del implante era muy delgada.
Actualmente estas cubiertas son más gruesas y de mejor calidad y se ha ido evolucionando a grandes pasos en la fabricación de implantes.
Fuente: Dr. Joege Krasovsky